En el mundo hay historias e historias, unas falsas y otras no tanto. No es mayor problema si son pequeñas diferencias de la historia contada a la real, pero cuando la diferencia es muy grande hace falta alguien que nos diga que eso no es así. Es lo que pretendo hacer hoy, contaros la verdad de lo que sucedió con aquel niño, que si bien no conocéis ninguno por el nombre, habéis visto más de una vez en una foto, la misma, siempre.

Kong Nyong con el buitre

Os suena, ¿verdad? Probablemente alguna vez hayais leido, o incluso dicho comentarios del tipo «que cabrón el fotógrafo por no ayudar» …sin saber si quiera que pasó. Eso mismo hizo la crítica por el año 1993, cuando se tomó y publicó por el New York Times esta foto del fotógrafo sudafricano Kevin Carter.

Los medios se cebaron con Kevin, diciendo incluso que era el «segundo buitre». Todo esto suponiendo que él estaba paseando cuando encontró la escena, hizo la foto, y se fue. Como muchas veces, no se investiga lo que sucedió y se hacen los comentarios sin mirar lo que de verdad ocurrió.

La verdad es esta:

Kong Nyong vivo mostrando la foto en la que aparece

Kong Nyong sobrevivió, así es. El que aparece en la imagen es él mostrando la foto de la que fue protagonista. Investigaciones que hizo el diario El Mundo y algunos otros diarios extranjeros muestran una historia totalmente distinta a la que se pensaba…solo que esa historia se mostró en el 2011, demasiado tarde, pues Kevin se suicidó en el 1994 tras recoger el premio Pulitzer, por la presión de ver tanta muerte, de los medios y por problemas económicos; una idea que quizá no se le habría pasado por la mente de haber sido respetado y apoyado por la comunidad periodística.

Kong Nyong murió hace unos 6 años, pero de fiebres, nada que ver con esto. Podría contar todo por escrito, pero queda más claro con el vídeo, corto, 6 minutos, de la investigación, merece la pena, de verdad.

Un saludo

PD: si os interesa y queréis ampliar la información, os dejo el enlace a la investigación completa – aquí

    1 comentario

  1. Soraya 1 junio 2013 a las 13:47 Responder

    Ese es nuestro gran error. Juzgar las cosas por la apariencia sin apenas saber la verdad de lo sucedido. Menuda sociedad señores. El mundo avanza pero nosotros damos pasos hacia atrás.

Dejar un comentario